Muy buenas, echando la
vista atrás parece que solo hablo de juegos de acción en primera
persona, y aunque mi repertorio videojueguil tiene muchos matices y es
muy extenso, hoy no va a ser el día en que os muestre argumentos en
contra de mi tendencia de cara a los shooters. ¿Adivinais sobre que
género os voy a hablar? Sí señor, ¡un shooter en primera persona! Eso
sí, esta vez aparte de un Shooter se trata de uno de los juegos con el
planteamiento más absurdo de la historia.
Y el juego que nos ocupa hoy es:
Su
nombre por si solo ya inspira respeto máximo. CATECHUMEN, se le llena
la boca a uno con solo pronunciarlo, en nuestra cabeza resuena con
fuerza su nombre, Catechumeeeeen, Catechumeeeeen, mientras más se repite
el nombre mayor es la inspiración, y más ganas tenemos de darle a
iniciar nueva partida, queremos matar, llevarnos a todo el mundo por
delante, es la hora de sacar las armas y asesinar a quién se aparezca por la pantalla,
pero... Espera ¿Qué ocurre? ¡Aquí falla algo!
Seguramente que al leer estas lineas la primera palabra que os venga a la mente es la de: Apasionante. Pues sin lugar a dudas, especialmente si sois de ese tipo de personas que pueden encontrar apasionante el masoquismo. Jugar a Catechumen es como practicar la auto lesión electrónica. Aburrido, absurdo y con una jugabilidad lamentable.
Si uno se para a mirar su imágenes ve que lo único lamentable en Catechumen no queda ahí, y que los gráficos tampoco es que sean la octava maravilla, no lo eran ni en su tiempo ni lo habrían sido tres años antes de su lanzamiento ¿Qué clase de ser humano pudo concebir tal atrocidad? ¿Que clase de criatura representa que es lo que sale en la última imágen? ¿El híbrido bastardo entre Gollum y Gizmo?
Sea como sea, probar un producto como este siempre va bien si somos los típicos padres repipis que piensan que sus hijos se van a volver asesinos en potencia por jugar a juegos tan peligrosos y ofensivos como GTA, cuya calificación por edades a nadie importa, y cuyo peligro potencial para nuestra salud como sociedad es algo a tener muy en cuenta si no queremos que nuestro día a día se llene de asesinos, violadores y demás chusma.
Tomad a Catechumen entre vuestros brazos, y así sereis como esa parte guay de la sociedad que juega a shooters, pero a su vez sereis moralmente superiores por haber encontrado ese juego que os permite pegar tiros sin que nadie muera, y así tendréis las almas limpias como los enemigos abatidos en este juego.
Para acabar dejo una pregunta al aire ¿Se echarán en el Vaticano unas partiditas a Catechumen?
Tan sólo tres palabras:
ResponderEliminarSUPER-NOAH'S-ARK-3D.
Bueno, en realidad eran tres palabra, un genitivo y acrónimo-neologismo.
Sin duda otra Bizarrada de juego realizada con el motor del primer Wolfenstein.
ResponderEliminarSe debería estudiar si depende que realizadores tomaban sustancias extrañas.
Amén
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